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XI Vuelta Náutica. Diario de a bordo (II)

4 Ago, 2009 - Por - 0 comentarios
En las plazas más próximas al puerto pesquero, frente a la lonja de Portonovo, se siente todo el trajín de los barcos pesqueros. Se duerme tan mal que hasta se agradece que te suene la alarma del móvil. A las 7:30, tratando de no hacer ruido para no despertar a las dos grumetes, hemos soltado amarras.
Mañana nublada y de agradable temperatura. De nuevo, mayor y motor, con la isla de Sálvora a la proa. La cita con el Golfiño y el Alefriz es a las 11:00 a la entrada del canal de Sagres, pero vamos tan sobrados de tiempo que optamos por adelantarnos y, dejando a estribor la isla de Sálvora, esperarlos en Corrubedo.
Pese a la bruma, divisamos la isla de Vionta y también el inconfundible faro de Isla Rúa, a la entrada de la ría de Arousa. Navegamos entre trasmallos y barcos pesqueros, con mar de fondo y olas de dos metros. Por un momento pienso que, dentro de lo malo, si nos falla el motor, no estamos tan desamparados. Pero me quito enseguida la idea de la cabeza y me concentro en coger las olas con maestría para aliviar los primeros síntomas de mareo entre la tripulación.
© Ricardo Grobas
A estribor, todos los islotes que delimitan el legendario canal de Sagres y, de frente, toda la línea costera entre Cabo Corrubedo (verde), el pueblo de Corrubedo (rojo y blanco) y el sistema dunar del Parque Natural (amarillo claro) se anuncia como un destino seguro o, al menos, como un necesario alto en el camino.
Poco tiempo nos dejan descansar en el fondeadero de Corrubedo –poco recomendable para los veleros, por la cantidad de cabos y de boyas que se agolpan en él y el consiguiente riesgo de enredarse–, pero es suficiente para asentar un poco el estómago con un café y unas madalenas. Vemos los mástiles del Alefriz y el Golfiño y levantamos el fondeo para reunirnos con ellos.
En la lejanía, la silueta de Cabo Fisterra no sé si interpretarla como una agradable o una temible invitación. El canal 9 de la radio me devuelve al momento presente: fondearemos en Muros y, lo primero de todo, nos tomaremos un pulpito y una cerveza. La travesía es, otra vez a motor, un tostón.
© Ricardo Grobas

En Muros, tarde de relax y compras de última hora: un termo y una navaja de cortar cabos. No tienen en ningún sitio tarjetas de conexión a Internet. Tendré que esperar para publicar.

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Edurne Baines

Soy periodista. Cofundadora y directora de la editorial Belagua. Trabajo en proyectos editoriales centrados en la comunicación turística de Galicia, y desarrollo tareas editoriales, de comunicación y de creación y gestión de contenidos para todo tipo de publicaciones. Soy navarra, vivo en Vigo y adoro Galicia.

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